Inspirados por la belleza natural de esta seta, los japoneses la llamaron “kawaritake” o “seta de las nubes”, debido al parecido entre sus ondas cambiantes de color y las nubes al atardecer. El nombre científico de cola de pavo (Trametes versicolor) hace referencia también a su llamativo aspecto.
Estas setas son delgadas y su textura puede describirse como dura y correosa. Se alimentan de maderas duras en descomposición, convirtiéndolas en una sustancia blanquecina, blanda y esponjosa, excelente para nutrir el suelo y todas las plantas que se alimentan de él.
Los practicantes de la medicina tradicional china llevan siglos utilizando la cola de pavo preparada en un té que tiene fama de aumentar la energía, fortalecer los pulmones, el estómago y el bazo.
Al igual que ocurre con otros hongos utilizados tradicionalmente en la medicina oriental, hoy en día varios estudios científicos han validado algunas de sus propiedades, aumentando su reputación y uso a escala mundial.
La dosis sugerida de cola de pavo seca en polvo oscila entre 1 y 2 gramos diarios y puede consumirse en cápsulas, mezclada con zumos o batidos de frutas o simplemente con un vaso de agua.
BENEFICIOS PARA LA SALUD
Los estudios preliminares sugieren que la cola de pavo:
Ayuda a reconstruir el tejido conectivo favoreciendo así la salud de las articulaciones
Ayuda a restablecer el equilibrio de la flora buena en el tracto gastrointestinal
Ayuda al cuerpo a estabilizar los niveles de cortisol en situaciones de estrés
Retrasa el envejecimiento gracias a su alto contenido en sustancias antioxidantes
Estimula la liberación de compuestos de apoyo inmunológico
Ayuda a proteger el hígado y a limpiar las toxinas